Sunday, November 20, 2016

Introspección

¿Cuándo fue la última vez que me pensé?
Os juro que realmente no recuerdo?
¿Cuándo fue el día, lugar y hora que dejé de pensar en todo(s) y me enfoqué en mi esencia?

¿Cuándo pasé de quien quería ser a quien solía ser?

Me emputo conmigo mismo, joder.
Me duele, me duelo, la tierra duele por mi.

Veo la lluvia caer y recuerdo cuando me encantaba mojarme en ella,
ahora me entrisrece, pues pienso que Dios llora porque no tengo salvación.
Me bebo solo esta Medalla y pienso mandarlo todo a la fregada.
Me cabreo porque me he perdido, aquel que pensaba que estaría siempre conmigo.
Porque ya no me basta con extrañar a personas que estuvieron o están...
Sino extraño al niño que en mi yacía, y veía solo lo hermoso de un lugar.

Soy la persona que hace mucho tiempo quería ser,
(pero)
no soy la persona que quiero ser ahora.

Recuerdo los días en que amaba la prosa, la poesía y lo que me hacía sentir,
ahora lloro, pues me vendí a las masas, buscando el aprecio, el afecto y la aprobación de las mismas.

Me duele pensar,
me duele que quise tanto cambiar,
que hoy aún es el día que lo intento,
pero sigo siendo el mismo tonto,
que nunca encontrará la paz.

Y me siento solo,
oh, cuán solo me siento.
No puedo acercarme A aquellos que una vez llamé amigos.
No encuentro refugio en el arte, no encuentro refugio en la anguistia,
solo encuentro paz en ser, solo ser, soy un ser sin propósito.

Y no le reclamo a Dios,
ni a una intervención divina,
esto me lo traje yo,
y las decisiones que tomé en la vida.


No hablaré de amantes,
no hablaré de problemas,
no hablaré de cosas que me pasan o que me atormentan.

Por primera vez en mucho tiempo, creo que debo ser el autor de mis propias malaventuranzas,
y creo que debo ponerle empeño a vivirlas, contarlas y disfrutarlas.

Anhelo el día en que el viento de poniente esté a mi favor.

Thursday, April 28, 2016

Mi hija

No puedo negar que siempre que lo pienso,
me imagino con un hijo, un hijo varón.
Pero si tengo una hija,
creo que sería mejor,
porque las mujeres son:
"los seres con más fervor".

Y no lo niego, cuando pienso en mi hija,
tengo mucho temor,
porque no quiero que sea de esas...
que se dejan llevar por el corazón.

No quiero que sea de esas,
que lloran por cualquier razón:
porque "mi ropa se manchó"
o
"mi muñeca se rompió".
¡NO!
Que sea de esas que:
se cayó y se levantó,
y que no le importe,
cómo el espejo la juzgó.

Que no sea una romántica,
que no persiga a un macho, un varón,
que sea autodidacta,
que ame el arte con pasión.

Quiero que en su juventud,
esté llena de ímpetu,
aunque tenga que aflojarse el pantalón...
No quiero que llegue a los treinta,
aún llevando la cuenta,
de lo que pasó y no pasó.

Me la imagino bohemia,
no me lo niego,
la veo en una casa,
con muchas flores
y paredes pintadas,
el aire apesta a cigarrillos,
pero su corazón...
está complacido.

Quiero que mi hija sea bien
(hija de la gran) puta,
de esas que me rompieron el corazón.
Para así estar seguro,
que el suyo,
no venga un chaval a romper,
de esos, como lo fui yo,
uno que solo quería joder.

En fin...
quiero que cuando muera, no llore,
ni una gota ni un río,
que recuerde que,
después de Dios,
yo le di libre albedrío.

Quiero que encuentre el verdadero amor,
otra alma llena de pasión,
que tenga hija propia,
y cuando pregunte por mi,
diga sin ningún rencór:
"Él no fue buen padre,
él fue el mejor."

Tuesday, February 23, 2016

Otra oda a otra mujer.

Te extraño.
Probablemente no seas tú, sino el cómo me sentía cuando nos hablábamos.
Ahora solo sois un triste recuerdo, una más que llegó solo a joder.

Recuerdo cuándo me contabas de esos filmes peculiares que habían marcado tu vida,
y,
yo te conté de esas canciones raras que habían salvado la mía,
y en ese momento no me podía contener.

Espero que te vaya bien, 
que solo me pienses en el ayer,
yo en el mañana seguiré,
y así tu recuerdo he de olvidar a querer.

Siendo honesto,
si pensara en mis problemas cotidianos,
los educativos, los económicos y sus pormenores,
en lugar de pensarte sin cesar,
seguramente no tendría "problema" alguno,
y posiblemente me pudiese relajar.

Me duele,
me duele saber que para mí ya no estamos vivos,
pues habitamos en un cementerio todo lleno,
lleno de amor incorrespondido.

Te quise,
porque a tu edad yo compartía,
al igual que tú,
ganas de superarme y rebeldía.

Me intrigaste,
ya que el miedo que sentía destrozaste.
[pero después de un tiempo, nuevamente otorgaste]

Te dije que escribiría sobre tí,
y así lo estoy haciendo,
te agradezco por éste sentimiento baladí,
me siento mal, pero estoy escribiendo.

Me dijiste que me querías,
y yo te decía que eras radiante y bonita,
y me prometiste que te sacaría a una cita.
Siendo honesto, he roto tantos corazones como lo he hecho promesas,
pero tú has roto tantas promesas como corazones,
somos atómicos.

Pido que Dios te otorgue tiempo,
ya que a mí me ha dejado solo,
que te dé paz carnal,
pues yo necesito paz espiritual.